La contienda por la representación de Renovación Popular en la Región Lima ha entrado en una fase crítica, marcada por tensiones y expectativas de desgaste político. Rafael Santos y Andrés Tello, dos figuras destacadas dentro del partido, se encuentran en una feroz lucha por la candidatura a la gobernación regional, generando un ambiente de inestabilidad en las filas de la agrupación.
El pasado 17 de septiembre, un comunicado emitido por Santos dejó en claro la magnitud de la disputa. En él, el candidato de Pueblo Libre exige respeto hacia los 9 comités provinciales que conforman Renovación Popular, evidenciando las grietas en la unidad del partido.
El clima de confrontación se intensificó tras la noticia de que Tello habría recibido una invitación del actual alcalde de Lima, Rafael Aliaga, para ser parte de su proyecto político. Esta invitación no ha pasado desapercibida y ha desatado una “reyerta política” entre ambos candidatos, que ven en este nuevo escenario una oportunidad y, al mismo tiempo, una amenaza. La posibilidad de que Tello se alinee con Aliaga ha generado suspicacias y ha reavivado viejas rencillas, ahora enmarcadas en un contexto electoral competitivo.
Con los comicios a la vista, ambas figuras deberán jugar sus cartas con cautela. La presión por obtener respaldo dentro de los comités provinciales, así como la necesidad de atraer al electorado, obligará a Santos y Tello a replantear sus estrategias.
A medida que se acercan las elecciones, todos los ojos estarán puestos sobre estos dos aspirantes. Su capacidad para manejar esta rivalidad y construir una narrativa cohesiva será determinante para el futuro de Renovación Popular en la Región Lima.
